En lo que llevo de universidad, algo que escucho a muchos estudiantes es que durante el cuatrimestre no suelen estudiar —o eso dicen—, así que cuando llega el periodo de exámenes les toca pisar a fondo desde el minuto uno para poder llegar a tiempo.
Admiro la resistencia de esas personas para aguantar todo el mes de exámenes con ese ritmo. Sin embargo, yo prefiero usar otros sistemas que me aporten más margen de tiempo y poder ir más aliviado —dentro de lo que es estar en exámenes—. Mi primer requisito es una buena gestión del tiempo y, una vez cumplido, aplicar las técnicas de estudio correspondientes.
La semana pasada escribí sobre cómo gestiono mi tiempo durante el periodo lectivo, ahora le toca al periodo de exámenes.
Nunca hay suficiente tiempo para hacerlo todo, pero siempre hay suficiente tiempo para hacer lo más importante.
Brian Tracy
PLANIFICA AL CUADRADO
Si algo debe quedar cristalino en estos dos artículos sobre gestión del tiempo es que un buen plan inicial es tu mejor salvavidas. Si bien no siempre se cumplirá al 100%, sin él nunca habrá opción a un plan B o C.
En el periodo lectivo tenemos el apoyo de un horario ya establecido, entonces es mucho más sencillo gestionar el tiempo. En exámenes, sin embargo, sólo tenemos la fecha de cada examen y, si nos descuidamos, malgastaremos tiempo a caudales. Para superar esa barrera, no hay que cambiar el sistema que vimos, sino intensificarlo. Lo que vas a preparar estará sujeto a múltiples modificaciones, pero no te dejes llevar por la pereza, recuerda que si con un plan necesitas cambios, improvisar puede llevarte al desastre.
Global
Un mes antes del primer examen, reserva mínimo una tarde para dedicarla en exclusiva a organizar —no exagero—. Antes de darle vida a tu plan maestro, deberás hacer lo siguiente:
- 🔢Ordenar las asignaturas en orden de examinación.
- 📅Preparar una cuenta atrás hasta cada examen (días o semanas), que se actualizará cada domingo.
- 📄Lista de todos los temas de cada asignatura.
- ✏Descripción básica de cada tema (largo, corto, difícil, fácil, importante, prescindible, etc.).
- 🧮Estimación de horas para cada asignatura en función de lo anterior, incluyendo repasos.
Una vez preparada la base, el siguiente paso es repartir los temas según el tiempo disponible hasta cada examen. Lo ideal es empezar todas las asignaturas lo antes posible, aunque sólo empieces con un tema a la semana para los últimos exámenes. Ten en cuenta que empezarás a estudiar en periodo lectivo, esto implica que el horario de exámenes y cuatrimestral se solaparán. Sabiendo esto, prepara estimaciones a grandes rasgos que ya irás matizando y deja un margen aproximado de 4-7 días con el examen.
Semanal
Este paso mantiene a punto tu plan por dos vías:
- Completa la estimación general inicial
- Rectifica cualquier cambio de rumbo que surja de la misma.
Como ya se vio en el artículo anterior, somos muy malos haciendo estimaciones, por lo que deberás reservar un día a la semana para evaluar tu progreso (e.g., domingo). Marca los temas que hayas estudiado, si los has repasado, si te has retrasado, etc.
En cuanto al plan exacto que prepares, te recomiendo que lo plantees como una lista de objetivos. Y si quieres ir más allá, haz la lista pública —yo lo hice aquí si te animas al reto—, eso te da una motivación adicional para afinar mejor y cumplir lo previsto.
Horario
Por último, el nivel diario. No hay gran diferencia con lo que hagas durante el periodo lectivo, pero sí me gustaría remarcar algunas cosas:
- No sobrecargues el horario. Te espera más de un mes bastante intenso, es mejor hacer 4-5 temas bien que 10 mal. Si decides hacer esos 10, sé consciente de que la baja eficiencia consumirá tiempo irrecuperable.
- Establece una hora límite. Relacionado con lo anterior, pon una hora para acabar la jornada o un límite de horas.
- El 10-20 % de margen se vuelve imprescindible para ahorrar correcciones de la previsión. No es lo mismo prever 3-4 h salteadas (periodo lectivo) que 6-8 h acumuladas (exámenes).
GESTIONA TU EXAMEN
No sirve de nada saber las respuestas de un examen si no tienes tiempo para contestarlas. Este año aprendí —gracias a Cal Newport— algunos trucos para gestionar mi tiempo en un examen, de hecho, sin ellos no habría acabado algún examen de este último curso.
Marcas de tiempo
Lo primero que tienes que hacer, después de identificarte, es poner marcas de tiempo en cada sección. Cuenta el número de páginas —y dale un vistazo rápido a algún enunciado— y reparte el tiempo disponible entre ellas. No olvides dejar un margen de unos 10 minutos para repasar. No tiene que ser exacto, aquí dejo algunos ejemplos:
Tiempo | Caras | Minutos/Cara | Distribución |
90′ = 80+10 | 6 | 80/6=13,3 | 13′-26′-39′-42′-65′-78′ |
90′ = 80+10 | 5 | 80/5=16 | 16′-32′-48′-64′-79′ |
Si no te quieres poner a calcular porque entras en pánico, haz una mera aproximación partiendo de 10. En estos ejemplos anteriores bastaría con poner poco más de 10. No te preocupes si te dejas más tiempo sobrante, con el siguiente paso verás que tendrás suficiente tiempo aun así.
Si no la sabes, ya saldrá
Las marcas de tiempo son una mera guía que te evita quedarte atrás, es decir, te marcan el ritmo que debes seguir. ¿Y cómo es ese ritmo? Tan simple como ir de fácil a difícil:
1- Responde las preguntas fáciles, aquellas que te vienen a la cabeza sin dificultad. Esto te asegura ya gran parte del examen y no consumes tiempo ni energía innecesarios. Si ahora te cruzas con alguna que no sepas, la saltas nada más leerla, ya se encargará tu subconsciente de ir procesándola.
2- Toca estrujarse la mollera, les toca a las preguntas que se te atragantan. Dado que has asegurado las fáciles en tiempo récord, puedes dedicarte a responder las difíciles —dar respuestas dignas incluso en las que toca improvisar—. Además, como tu subconsciente lleva trabajando desde que leyó la primera pregunta difícil, responderás más rápido —un puntazo a favor 🔝🔝—.
En lo que a gestión del tiempo se refiere, esos dos consejos son los que más me han servido dentro de los que aparecen en el libro. Hay más tanto por su parte, como por la mía o por otras fuentes, pero irían enfocados a cómo hacer el examen y eso es mejor dejarlo para otro momento. [Aquí incluyo algún consejo adicional]
Se podría decir que el periodo de exámenes es la guerra y cada examen una batalla. Nos guste o no, tenemos que ganar esa guerra para pasar de curso y/o buscar un buen expediente. Hoy has aprendido a sentar las bases de tu plan, pero no servirá de nada si no lo llevas a cabo. Para ello, los 3 pilares restantes te ayudarán a preparar las batallas y, más adelante, te contaré como manejarte dentro de una.
Fuentes recomendadas
Cal Newport (2007). How To Become a Straight-A Student: The Unconventional Strategies Real College Students Use to Score High While Studying Less. Pp. 19-38, 116-122. Three Rivers Press.
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