Una de las claves que pueden llevarte al éxito en tu examen tipo test es darle a la improvisación un papel secundario. Está claro que es imposible predecir todo lo que va a pasar o tener preparadas todas las posibilidades, pero un plan sólido puede quitarte mucha presión y permitirte dar lo mejor en las partes de improvisación.
Esta es la segunda parte de la guía para exámenes tipo test, donde aprenderás a aplicar la fórmula del número óptimo de respuestas dentro de un protocolo completo. El protocolo está pensado para aplicarlo en el examen incluso con la presión del momento. Incluye desde preparar la estrategia con la fórmula hasta los pasos para usarla dentro del examen.
Un ejército victorioso gana primero y entabla la batalla después; un ejército derrotado lucha primero e intenta obtener la victoria después. Esta es la diferencia entre los que tienen estrategia y los que no tienen planes premeditados.
Sun tZu (El arte de la guerra)
🏠 Trabajo en casa
Es fácil pensar que antes del examen sólo hay que preocuparse por estudiar, pero hay muchas más variables que puedes dejar controladas si les prestas atención.
🗺 Inspecciona el terreno
La primera variable de todas es saber las condiciones del examen:
- ¿Cuántas preguntas test tiene?
- ¿Cuántas opciones tiene cada pregunta?
- ¿Cuánto suma un acierto?
- ¿Cuánto penaliza un error?
- ¿Con qué nota se aprueba?
- ¿Cuánto tiempo dura el examen?
Aparte de esas cuestiones básicas, también puedes aprovechar otras más personalizadas a la asignatura y sus profesores:
- ¿Cuántas preguntas le corresponden a cada profesor?
- ¿Qué peculiaridades tiene cada profesor? Dificultad de sus preguntas, si hace muchas ambiguas o difíciles de comprender, si busca el detalle o ir a pillar, si suelen anular preguntas…
- ¿Hay preguntas de ejemplo o de años anteriores?
Además, cualquier otro tipo de información sobre el examen puede serte de inmensa ayuda al planificar el estudio de la asignatura.
Como esta guía tiene muchas referencias a “El arte de la guerra”, ¿por qué no incluir otra más?: “Conoce al enemigo y conócete a ti mismo, y sobre tu victoria no caerán dudas; conoce el Cielo y la Tierra, y tu victoria estará asegurada del todo”. Conocer tus capacidades como estudiante y cómo aprovecharlas, las características del examen y a los profesores te genera una posición muy ventajosa.
🔮 Aplica la fórmula mágica
Dejando a un lado las consideraciones iniciales de antes, vamos ya al lío. El pilar de la estrategia será la fórmula aprendida en la primera parte de la guía:
N x O + n x (1 + r)
- N = número de preguntas del examen.
- O = calificación objetivo (%) → ej.: 60% = 6/10.
- r = número de fallos que anulan un acierto (reinicio) → ej.: acierto vale 1 y fallo resta 0,25 = 4 fallos anulan 1 acierto.
- n = orden de la respuesta óptima (1ª, 2ª, 3ª…)
La fórmula te dirá el número óptimo de respuestas, ni una más ni una menos. Sin embargo, exige una condición: cada número óptimo permite un número máximo de fallos (n x r).
Lo más cómodo es tener sólo un plan con tu nota objetivo o esperable, aunque mi consejo personal es tener también un plan de emergencia (aprobado justo o rebajar expectativas). El plan de emergencia permite redirigir un mal día, pero espero que nunca lo necesites.
📝 Dentro del examen
🧭 Ubícate
Justo después de escribir el nombre, reparte el tiempo del examen para despreocuparte de él. Es tan sencillo como poner en la calculadora (tiempo – 10 minutos) / nº páginas. Después, indica en cada página en qué minuto debería estar acabada esa página o bloque. Este reparto es mucho más efectivo en otro tipo de exámenes, pero también es útil para marcar un ritmo en la primera y segunda vuelta. [En este artículo incluyo más información sobre repartir el tiempo en el examen].
Cuando acabes de enumerar la última página, escribe tu estrategia en la página de respuestas. Simplemente, escribe tus combinaciones (20 respuestas 4 fallos | 25 respuestas 8 fallos | …).
1ª vuelta
Ya puedes empezar a responder. Tu objetivo ahora es hacer una vuelta rápida para quitarte las preguntas que sabes a la primera. De todos modos, esta vuelta no está exenta de riesgos, así que deberás traer de casa un número de fallos de margen para esta vuelta (fallos 1ª vuelta). Tu primer número óptimo de respuestas deberá ajustarse a ese número de fallos.
Mientras respondes, marca las preguntas donde dudes entre 2 y 3 opciones (dudosas Nv.1 y Nv.2 respectivamente). Te servirán más adelante.
Una vez acabes de responder la primera vuelta, comprueba si has llegado a tu primer número óptimo de respuestas. Si no lo alcanzas, pasarás a la 2ª vuelta. Como situación excepcional, si lo sobrepasas, puedes plantearte: i) plantarte o ii) seguir hasta el siguiente número óptimo. Como en el peor de los casos, responder hasta el siguiente punto óptimo no te bajará de tu objetivo inicial, merecer la pena.
2ª vuelta
Cuenta cuántas preguntas te quedan hasta el número óptimo de respuestas y responde a tantas dudosas Nv.1 como necesites para llegar. Debes asumir un 50% de fallo para estas preguntas, así que suma considerando 1 fallo cada 2 respuestas. Si queda sólo 1, considérala fallo. Si no cumples los requisitos del punto óptimo o te quedas sin dudosas Nv.1, tendrás que iniciar la 3ª vuelta ⚠.
3ª vuelta
Aquí, ya nos metemos en preguntas dudosas Nv.2, que se fallan 2 de cada 3, por lo que es mejor plantearse si seguir o no. Si estamos a sólo 1 o 2 casillas del punto óptimo, no llegamos al acierto de compensación, por lo que puede interesarnos plantarnos si no estamos en una situación de emergencia. En caso de seguir respondiendo, como mínimo habrá que responder a 3 para llegar a esa compensación.
Como situación excepcional, si te has quedado lejísimos de tu punto óptimo incluso respondiendo a todas las Nv.2, comprueba si llegas a tu plan de emergencia (o te quedas cerca). Mucha suerte si se da el caso.
🎁Regalo por llegar hasta el final
Por último, adjunto el protocolo resumido en formato PDF con ejemplos de su aplicación incluidos. Sé que puede ser poco práctico tener que buscar siempre este artículo, así que tenerlo compactado en un diagrama de flujo es canelita en rama 😎.
Este protocolo lo considero muy adecuado bajo mi experiencia personal, pero cada uno puede tener uno propio o adaptarlo a su estilo propio. Existen otros sistemas en internet, libros… que son totalmente válidos, como el de David Fuentes, que se asemeja mucho al mío. Lo importante en cualquier caso es ir preparado.
Es cierto que la fórmula y el protocolo son dos herramientas que incrementan exponencialmente tus posibilidades de éxito, pero no son la panacea. No sirve de nada planificar una victoria perfecta si luego no tienes un ejército con el que conseguirla, así que estudia de manera eficiente para que tus conocimientos logren esa victoria que has planificado.
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